El transporte urbano de Cádiz se reduce a 5 líneas de autobuses dada la fácil configuración de la ciudad y el modelo egocéntrico adoptado desde San Antonio. La media de ocupación anual es de 12.873.504 pasajeros al año habiendo sido usado desde el 2000 por 141.608.534 de usuarios. Cubre las 5 líneas con una flota de 48 autobuses con vehículos aun de 1994 en circulación la vida media de un autobús en la ciudad es de 12 años cuando la media de otras ciudades no supera los 7.Cada uno puede hacer sus cálculos y sus comparaciones pero, a todas luces, es otra empresa más que obtiene beneficios a costa de los gaditanos como bien nos han hecho ver esta semana el Ayuntamiento. Cada autobus genera al año 230.000 euros.
Autobuses obsoletos aún con uso de petroleo, sin control gps para respetar horarios, ni marcadores en las marquesinas para saber tiempos de espera son algunas características del servicio.
El tranvía, si no es controlado por el ayuntamiento, supondría una seria competencia a este monopolio que nos intentan vender en las ultimas semanas como un servicio de calidad (Diario de Cádiz 30 de mayo y 26 de junio) y nada más lejos de la realidad. Es caro para el servicio que ofrece. Además el número de bono-bus que el Ayuntamiento pone a disposición de la ciudadanía es un número limitado al mes no facilitando para nada acceder a estos descuentos.
Mejorar el servicio es fácil, solo hay que renovar la flota con vehículos ecológicos, mantener comunicación directa con los autobuses dotándolos de radio y gps, informar en las paradas del tiempo de espera y sobre todo ajustar el costo para el ciudadano al real que en Cádiz no superaría mas de los 0,80 euros y un bono-bus universal a 0,50, además es necesario diversificar la oferta con el tranvía y el metro.
¿O es que hay que mantener en un nivel de ocupación buena los aparcamientos subterráneos?
El concesionario del servicio desde tiempo inmemorial es TRANVÍA DE CÁDIZ A SAN FERNANDO Y CARRACA SA. En 2008 hizo 11.000.000 euros en ventas y la empresa pertenece a la Fundación Octavio Comes con casi el 73% del accionariado.


